Es la gran anécdota de la temporada. La amarilla que vio Sinama cuando recibió un empujón ha sido anulada. Ha costado, y casi se puede decir que es una batalla ganada en la terrible guerra arbitral que lleva el Recreativo este año. El fallo "humano" del colegiado, el fallo "humano" del Comité y por fin el acierto "lógico" de apelación.
Aún así las quejas de Paco Muñoz, abogado y directivo del Recreativo no han trascendido, aunque parecen surtir efecto. Eso sí, no alucinemos, la de Iago Bouzón no la retiran. Parece incluso que tengamos que aplaudir por que se hagan las cosas bien, pero es que no lo merecen. Si pretenden de alguna forma callarnos con esta acción se pueden dar con un canto en los dientes. Debemos seguir llorando, que hoy en día llora el rico y llora el pobre, pero el pañuelo está claro para quien va a ir.
¿Creeis que anular la tarjeta de Sinama es una forma de "mandarnos a callar"? ¿Creeis que será como un regalo que nos hacen? ¿Creeis que el Deporte Rey en España se puede mover por estos patéticos equilibrios morales que os comento?
